Ambas empresas, junto con otras 19, han sido obligadas a retirar material religioso ofensivo después de que varios demandantes protestasen por ciertas imágenes que atacaban a hindúes, musulmanes y cristianos.
Las demandas de dos personas han levantado los temores a que se proceda a cierta censura en la democracia más poblada del mundo. «Nuestro equipo ha revisado el contenido y lo ha bloqueado en los dominios locales del buscador (Google), Youtube y Blogger», explicó la portavoz de Google en India, Paroma Roy Chowdhury.
El año pasado, el Gobierno indio aprobó una ley que responsabiliza a las empresas del contenido que suban sus usuarios a sus dominios y obliga a las compañías a retirar el contenido ofensivo en menos de 36 horas.
Las compañías explicaron que recibieron la petición a finales del mes pasado tras presentarse dos demandas por separado, pero que hasta ahora no han podido retirar el contenido. Roy Chowdhury se negó a comentar qué se había retirado mientras que los representantes de Facebook indicaron que explicarían más adelante su visión de los hechos.
La primera denuncia fue interpuesta por un estudioso islamista. El tribunal de Nueva Delhi que lleva esta denuncia instó este lunes a las compañías a realizar un informe sobre los pasos que han llevado a cabo para bloquear contenido ofensivo y presentar las conclusiones en 15 días. El demandante, Mufti Aijaz Arshad Qasm, dirige una página web, fatwaonline.org, en la que responde a cuestiones morales.
«Microsoft ha presentado un recurso contra la demanda debido a que no hay razón para tomar acciones contra Microsoft», explicó un portavoz de la empresa. «El caso está en marcha y no se pueden realizar más comentarios», añadió.
Recursos de las grandes compañías por otro juicio
Por otro lado, Google, Facebook, Yahoo y Microsoft han presentado un recurso en el Tribunal Superior de Nueva Delhi después de que dicho organismo les obligase a retirar contenido tras una denuncia interpuesta por el periodista Vinay Rai.
El Tribunal todavía debe pronunicarse sobre este recurso, pero los jueces que lo forman indicaron a las empresas a finales de enero –cuando recibieron la demanda– que eran responsables de los contenidos en su webs y les advirtieron de que podrían bloquear dominios «como en China» si no controlaban los datos almacenados.
Tras la denuncia de Rai, el Tribunal llevó a juicio a las compañías por distribuir material ofensivo para menores, indicando que algunas de sus imágenes eran ofensivas contra el profeta Mahoma, Jesús y varios dioses hindúes, así como líderes políticos. «Si las compañías ya han retirado contenido, deberían poner en práctica dicho mecanismo para hacerlo de forma regular, en vez de esperar a que lo diga un tribunal», indicó Rai.
India se ha convertido en el tercer país del mundo por volumen de acceso a internet, a pesar de que solo uno de cada 10 indios tiene conexión en una población de 1.200 millones de personas.