Tan fácil y rápido como pagar con tarjeta de crédito, pero la cartera en este caso es el móvil. Basta con acercarlo a un terminal de punto de venta similar a los habituales y autorizar el pago. La primera experiencia piloto de España con este sistema la pondrán en marcha La Caixa, Telefónica, Samsung y Visa en Sitges durante seis meses a partir de mayo próximo.
La clave del nuevo sistema es un tipo de chip llamado NFC (que corresponde a las siglas en inglés de comunicación de campo cercano o proximidad) que empezarán a incorporar los teléfonos móviles de forma paulatina. El director de Telefónica en Catalunya, Kim Faura, apuntó ayer que en dos años llevarán NFC el 20% de los móviles.
A eso hay que sumar que las entidades financieras están convencidas de que el NFC es uno de los sistemas de pago con más futuro. La Caixa, líder en España en banca móvil, también apuesta por esta tecnología. Su director general adjunto, Antoni Massanell, anunció que después de la prueba de Sitges se podrá extender esta forma de pago a toda España en el 2011.
La mecánica del pago es sencilla. El chip contiene los mismos datos que una o varias tarjetas de un cliente. Y transmite esa misma información al terminal de punto de venta donde el vendedor ha introducido previamente el precio. El teléfono pide una autorización y el cliente puede solicitar un recibo.