Un despacho de abogados de Maryland (EE UU) es el primero en presentar una querella contra el iPhone 4 de Apple y la operadora AT&T. El fundamento de la querella son los problemas de diseño de la antena.
El mal funcionamiento del aparato, según los abogados, acusa a ambas compañías de negligencia, defectos de fabricación, ruptura de la garantías, malas prácticas comerciales y fraude entre otras consideraciones.
Al defecto de diseño, que impide la normal cobertura de las comunicaciones, se añadió la respuesta de Steve Jobs quien, en lugar de lamentar el fallo, culpó a los compradores de no saber coger bien el teléfono. Las personas zurdas son particularmente las más perjudicadas por la situación de la antena.
Nokia aprovechó el fallo para ironizar sobre lo bien que se cogen los móviles de la marca finlandesa.